Que es el Hambre emocional?

Emoción buena o emoción mala?

Las emociones como respuestas psicofisiológicas (es decir de la mente y del cuerpo) de los individuos a estímulos internos (de las propias vivencias de la persona) o externos (de aquello que sucede en el entorno) y que tienen influencia a diferentes niveles en las personas.  Así, podemos decir que no hay emociones buenas y malas, si no que todas ellas son una fuente de información sobre cosas que están sucediendo en nuestro interior o en el exterior.

Para hablar de este nuevo concepto "El hambre emocional", pongamos un ejemplo: el miedo nos avisa de una amenaza y nos lleva a protegernos, la rabia nos informa de una injusticia y nos prepara para la acción o la alegría nos acompaña cuando experimentamos una ganancia y nos invita a compartir. Puede que algunas las experimentemos como agradables o desagradables, nuestro cerebro está preparado para procesar esa información y dar una respuesta; sin embargo, en algunos casos esa respuesta podría ser exagerada, este es el caso de las fobias. 

Emociones y alimentación

La alimentación puede estar ligada a nuestras emociones a lo largo de nuestra vida y ser un factor condicionante a nuestras emociones; veamos los casos mas comunes en relación a la alimentación y las emociones:

1. Desde que somos niños se establece una relación emocional con la alimentación, ya que en los primeros meses y años de vida la fuente de nutrición principal procede de la persona cuidadora o cuidadoras primarias. Así, cuando se recibe la comida que ofrecen estas personas, se establece una relación de cuidado y protección con el alimento.  
2. A lo largo de nuestra vida existen también otras fuentes de influencia social donde la alimentación cobra un papel emocional, como los cumpleaños, los aniversarios, etc.
3. Uno muy frecuente es la función de los alimentos como “regalo”, para demostrar afecto o cariño por ejemplo cuando alguien regala una caja de bombones o invita a otra persona a cenar a un restaurante.
   
4. Otro muy subliminal el "el premio", cuando uno hace una buena acción, como sacar buenas notas, ganar en un deporte, un ascenso en el trabajo, etc.

Emoción - Cerebro

Se ha visto en muchos estudios que los sabores potencian esa emoción como el azúcar, los saborizantes como el glutamato, la sal, etc. que van a relacionar a nivel cerebral ciertos sabores con sensaciones de placer y bienestar; un ejemplo característico es el chocolate que contiene triptófanos. hasta aquí podríamos asegurar que la alimentación y las emociones se convierten en algo habitual en el ser humano y es aquí donde debemos diferenciar si esa emoción es positiva o negativa y en la mayoría de casos dependerá de las experiencias personales que hayamos tenido con cada una de estas situaciones.

si bien al ser humano le resulta difícil manejar sus emociones con situaciones interpersonales se convierte muchas veces en algo muy complicado cuando esta ligado a la "comida", y es donde los estímulos positivos o negativos nos pueden llevar a las Fobias alimentarias, a la compulsividad alimentaria y a todos los trastornos ligados a ella conduciéndonos en muchos acasos a complicaciones con la salud mental y física.

 

¿Ansiedad o angustia?

La ansiedad es un síntoma de que algo peligroso puede suceder; es una señal de alerta y de anticipación ante un evento o situación que hay que afrontar; en pocas palabras la ansiedad tiene una función adaptativa que nos prepara para una acción determinada. ¿Y qué tiene que ver con la alimentación? Pues en realidad si vemos el concepto mismo no tiene nada que ver, el problema surge es que puede despertar emociones que son compensadas con la comida y ahí se confunde el concepto de "que la gente come por ansiedad", cuando en realidad es mas bien una válvula de escape para esas emociones de alerta del ser humano; sobre todo cuando la ansiedad se vuelve patológica y el organismo experimenta cambios vasomotores como agitación, taquicardia, sudoración, etc.; y ahí  la comida se convierte en un “tapa-hueco” de la situación a corto plazo y es para calmar esos síntomas propios de la ansiedad que son temporales pero que a largo plazo se convierten ya en un verdadero problema de salud como la obesidad y todos los trastornos ligados a ella.

 

¿Cómo salir del hambre emocional?

Cuando el hambre emocional se ha vuelto “patológica” y conlleva conductas disfuncionales como la ansiedad por comer, el comer compulsivamente, atracones etc. es momento de tomar las medidas correctivas como acudir a un "Medico2 y evaluar el tratamiento tanto dietético como psicológico, enfocar el problema desde el punto de vista de la "Salud"........ lamentablemente en un gran porcentaje de casos las personas recurren a hacer dietas absurdas o las de moda: keto, dieta de la piña, ayunos absurdos, o información en las redes sociales con gente inescrupulosa que quiere vender productos fraudulentos o los llamados "coach" que en la mayoría de casos no saben ni donde están parados y que al final terminan empeorando el problema de la compulsividad alimentaria o los trastornos alimentarios que ms adelante llevara a muchos a tratamientos farmacológicos asociados a la depresión. 

Recuerden que las emociones no se compensan ni se tapan con la comida, las emociones nos sirven como una manera de expresarnos y afrontar la vida, aprender a controlarlas para convertir nuestras experiencias de vida en respuestas positivas y adecuadas para así mejorar nuestra relación con los demás y llevar una salud mental acorde a los tiempos.......................... 

El primer paso que se debe hacer es darse cuenta que "La comida no es un problema y a la vez a comida no es la solución"; la verdadera herramienta es "Una buena asesoría emocional y alimentaria"

 

 

Dr. Gerardo Bouroncle Mc Evoy