ALIMENTACION EN LA TERCERA EDAD
En los últimos 50 años se ha producido un aumento considerable de la esperanza de vida, y ligado a ello, el incremento progresivo de la población de edad avanzada. Esto ha traído como consecuencia el estudio de muchas enfermedades asociadas con los estilos de vida; haciendo que cada vez se tomen mayores medidas en los consultorios médicos hacia los pacientes en mejorar la calidad de vida asociada a una buena alimentación, hábitos saludables de higiene y actividad física.
Hasta hace algunos años nos referíamos a las personas mayores como anciano, persona mayor, persona de edad avanzada; hasta denominarlo de la tercera edad. Este término ha tenido una mejor acogida ya que definitivamente encierra un aspecto de la vida en donde se tiene una mayor experiencia en la vida. La alimentación influye directamente sobre el estado de salud, no sólo por lo que un buen estado nutritivo representa con respecto a una menor mortalidad, sino también por lo que supone en cuanto a prevención de numerosas enfermedades e incapacidades frecuentes en los las personas de la tercera edad.
Los japoneses dicen que quien llega sano a los 60 años sin tomar medicinas y no acarrea ninguna enfermedad crónica vivirá 30 años más; es decir 1/3 de vida más; mirémoslo de esta manera; 30 años de Niño y adulto joven; 30 años de adulto maduro y lógicamente nos faltarían 30 más, estaremos en condiciones de llegar a esa expectativa de vida?
Aunque la relación entre nutrición y salud es incuestionable, es en la tercera edad cuando los planteamientos nutricionales en cuanto a requerimientos cambian; aquí la alimentación debe mejorar, lamentablemente la malnutrición es uno de los problemas clínicos más frecuentes entre la población de la tercera edad y pasa desapercibido.
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL ESTADO NUTRICIONAL EN LA TERCERA EDAD:
En la población de la tercera edad, las variaciones individuales respecto al estado de salud, actividad física y cambios fisiológicos son mayores que en los más jóvenes y pueden influir de manera mucho más importante en el estado nutricional.
1. HABITOS Y ACTIVIDAD
La pérdida de masa muscular, es importante por la relación que tienen con la potencia muscular, la incapacidad funcional, las caídas y la función respiratoria. Por eso, el ejercicio es muy importante, ya que influye en los cambios en la composición corporal y en el mantenimiento de la masa ósea y tejido muscular……la alimentación aquí es indispensable.
2. FISIOLOGICO
Un aspecto importante es la menor percepción de la sensación de sed asociada al proceso de envejecimiento. Esto determina un riesgo alto de deshidratación especialmente en aquellas circunstancias en las que se producen pérdidas excesivas de líquido: sudoración, vómitos, diarreas, quemaduras, empleo de diuréticos, etc.
El aparato gastrointestinal también experimenta modificaciones importantes. Si empezamos por la boca tal vez la más significativa sea la falta de piezas dentarias y su principal consecuencia es la dificultad para masticar.
La disminución de la secreción de saliva, y los sabores se perciben de manera diferente y genera una dificultad para la deglución.
También disminuye la superficie y capacidad de absorción de la mucosa del estomago e intestino. A todo ello hay que añadir las enfermedades digestivas, que son más frecuentes en los las personas de la tercera edad……………………….nuevamente la alimentación vuelve a cobrar importancia.
3. PSICOLOGICO
Los hábitos alimentarios del las personas de la tercera edad, son el resultado de unos patrones de conducta establecidos durante muchos años y por tanto muy difíciles de cambiar. Diversas situaciones que cambian estas costumbres pueden alterar la alimentación: hospitalización prolongada, alejamiento de la familia, enfermedad del cónyuge, muerte del cónyuge, incapacidad física…………….El alimentarse adecuadamente se vuelve la piedra angular de todo esto.
4. MEDICAMENTOS
Las personas de la tercera edad, consumen con frecuencia varios medicamentos; la “polifarmacia” en algunos casos es exagerada debido a la elevada prevalencia de enfermedades crónicas que presentan, no solo se toman medicamentos para las enfermedades sino también para evitar complicaciones de las mismas y tenemos a una persona hipertensa tomando además de antihipertensivos, aspirina, diuréticos, cardiotónicos, hipolipemiantes. Los medicamentos pueden interferir en el estado nutricional por varios mecanismos que guardan relación con la absorción, el metabolismo o la excreción de distintos nutrientes. Si a esto le sumamos alcohol y el tabaco, estos pueden afectar directamente al estado nutricional.
5. PREVENCION
La valoración del estado nutricional en los las personas de la tercera edad, como indicador de su estado de salud, se utiliza especialmente para conocer lo antes posible los estados subclínicos o clínicos de la malnutrición presente con tanta frecuencia en esta población.
Las principales medidas que se necesitan para determinar el estatus nutricional son:
• Peso y altura El peso y la altura se utilizan también para conocer el área de la superficie corporal, la cual influirá en la dosificación de los medicamentos.
• Índice de Masa Corporal, Una evaluación muy utilizada es el Índice de Masa Corporal, que relaciona el peso/talla2, pero en las personas de la tercera edad esta medida presenta limitaciones por existir una disminución fisiológica tanto del peso como de la talla a partir de cierta edad.
• Índice de creatinina/altura nos determinará como está la función renal y que alimentación es la más adecuada en cuanto a proteínas, grasas, carbohidratos y minerales. Así como la cantidad de líquidos a manejar.
• Determinación del gasto metabólico basal.
Las llamadas enfermedades de la vejez son en muchos casos enfermedades crónicas con implicaciones nutricionales muy importantes.
CUESTIONARIO DE EVALUACIÓN DE RIESGO
POR ALIMENTACIÓN INCORRECTA
EN LO ADULTOS DE LA TERCERA EDAD
Por cada respuesta SI sume 1 punto, por cada respuesta NO, no hay puntos.
1. ¿Hace menos de 2 comidas al día?
2. ¿Come menos de 5 raciones de fruta y verdura por día?
3. ¿Toma más de 3 copas de bebida alcohólica por día?
4. ¿Tiene problemas para masticar por sus dientes y encías?
5. ¿Come solo la mayoría de las veces?
6. ¿Tiene problemas para ir a comprar sus alimentos?
7. ¿Tiene problemas para preparar sus alimentos?
8. ¿Padece alguna enfermedad que no le permita comer como comía?
9. ¿Toma más de tres pastillas de medicamentos al día (no vitaminas)?
10. ¿Ha bajado más de 4 kilos en los últimos tres meses?
EVALUACIÓN
Más de 5 puntos
ALTO RIESGO
Buscar ayuda y solicitar orientación profesional.
________________________________________
De 3 a 5 puntos
BAJO RIESGO
Revisar las respuestas afirmativas y si le es posible modificarlas.
________________________________________
Menos de 3 puntos
SIN RIESGO
Repita en 6 meses
Ahora; esto es para las personas de la tercera edad; sin embargo si usted no ha llegado a esta y su cuestionario da positivo más de tres; pues nuestra edad cronológica deberíamos ponerla en consideración……………………cuántos años tiene realmente?
En los últimos 50 años se ha producido un aumento considerable de la esperanza de vida, y ligado a ello, el incremento progresivo de la población de edad avanzada. Esto ha traído como consecuencia el estudio de muchas enfermedades asociadas con los estilos de vida; haciendo que cada vez se tomen mayores medidas en los consultorios médicos hacia los pacientes en mejorar la calidad de vida asociada a una buena alimentación, hábitos saludables de higiene y actividad física.
Hasta hace algunos años nos referíamos a las personas mayores como anciano, persona mayor, persona de edad avanzada; hasta denominarlo de la tercera edad. Este término ha tenido una mejor acogida ya que definitivamente encierra un aspecto de la vida en donde se tiene una mayor experiencia en la vida. La alimentación influye directamente sobre el estado de salud, no sólo por lo que un buen estado nutritivo representa con respecto a una menor mortalidad, sino también por lo que supone en cuanto a prevención de numerosas enfermedades e incapacidades frecuentes en los las personas de la tercera edad.
Los japoneses dicen que quien llega sano a los 60 años sin tomar medicinas y no acarrea ninguna enfermedad crónica vivirá 30 años más; es decir 1/3 de vida más; mirémoslo de esta manera; 30 años de Niño y adulto joven; 30 años de adulto maduro y lógicamente nos faltarían 30 más, estaremos en condiciones de llegar a esa expectativa de vida?
Aunque la relación entre nutrición y salud es incuestionable, es en la tercera edad cuando los planteamientos nutricionales en cuanto a requerimientos cambian; aquí la alimentación debe mejorar, lamentablemente la malnutrición es uno de los problemas clínicos más frecuentes entre la población de la tercera edad y pasa desapercibido.
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL ESTADO NUTRICIONAL EN LA TERCERA EDAD:
En la población de la tercera edad, las variaciones individuales respecto al estado de salud, actividad física y cambios fisiológicos son mayores que en los más jóvenes y pueden influir de manera mucho más importante en el estado nutricional.
1. HABITOS Y ACTIVIDAD
La pérdida de masa muscular, es importante por la relación que tienen con la potencia muscular, la incapacidad funcional, las caídas y la función respiratoria. Por eso, el ejercicio es muy importante, ya que influye en los cambios en la composición corporal y en el mantenimiento de la masa ósea y tejido muscular……la alimentación aquí es indispensable.
2. FISIOLOGICO
Un aspecto importante es la menor percepción de la sensación de sed asociada al proceso de envejecimiento. Esto determina un riesgo alto de deshidratación especialmente en aquellas circunstancias en las que se producen pérdidas excesivas de líquido: sudoración, vómitos, diarreas, quemaduras, empleo de diuréticos, etc.
El aparato gastrointestinal también experimenta modificaciones importantes. Si empezamos por la boca tal vez la más significativa sea la falta de piezas dentarias y su principal consecuencia es la dificultad para masticar.
La disminución de la secreción de saliva, y los sabores se perciben de manera diferente y genera una dificultad para la deglución.
También disminuye la superficie y capacidad de absorción de la mucosa del estomago e intestino. A todo ello hay que añadir las enfermedades digestivas, que son más frecuentes en los las personas de la tercera edad……………………….nuevamente la alimentación vuelve a cobrar importancia.
3. PSICOLOGICO
Los hábitos alimentarios del las personas de la tercera edad, son el resultado de unos patrones de conducta establecidos durante muchos años y por tanto muy difíciles de cambiar. Diversas situaciones que cambian estas costumbres pueden alterar la alimentación: hospitalización prolongada, alejamiento de la familia, enfermedad del cónyuge, muerte del cónyuge, incapacidad física…………….El alimentarse adecuadamente se vuelve la piedra angular de todo esto.
4. MEDICAMENTOS
Las personas de la tercera edad, consumen con frecuencia varios medicamentos; la “polifarmacia” en algunos casos es exagerada debido a la elevada prevalencia de enfermedades crónicas que presentan, no solo se toman medicamentos para las enfermedades sino también para evitar complicaciones de las mismas y tenemos a una persona hipertensa tomando además de antihipertensivos, aspirina, diuréticos, cardiotónicos, hipolipemiantes. Los medicamentos pueden interferir en el estado nutricional por varios mecanismos que guardan relación con la absorción, el metabolismo o la excreción de distintos nutrientes. Si a esto le sumamos alcohol y el tabaco, estos pueden afectar directamente al estado nutricional.
5. PREVENCION
La valoración del estado nutricional en los las personas de la tercera edad, como indicador de su estado de salud, se utiliza especialmente para conocer lo antes posible los estados subclínicos o clínicos de la malnutrición presente con tanta frecuencia en esta población.
Las principales medidas que se necesitan para determinar el estatus nutricional son:
• Peso y altura El peso y la altura se utilizan también para conocer el área de la superficie corporal, la cual influirá en la dosificación de los medicamentos.
• Índice de Masa Corporal, Una evaluación muy utilizada es el Índice de Masa Corporal, que relaciona el peso/talla2, pero en las personas de la tercera edad esta medida presenta limitaciones por existir una disminución fisiológica tanto del peso como de la talla a partir de cierta edad.
• Índice de creatinina/altura nos determinará como está la función renal y que alimentación es la más adecuada en cuanto a proteínas, grasas, carbohidratos y minerales. Así como la cantidad de líquidos a manejar.
• Determinación del gasto metabólico basal.
Las llamadas enfermedades de la vejez son en muchos casos enfermedades crónicas con implicaciones nutricionales muy importantes.
CUESTIONARIO DE EVALUACIÓN DE RIESGO
POR ALIMENTACIÓN INCORRECTA
EN LO ADULTOS DE LA TERCERA EDAD
Por cada respuesta SI sume 1 punto, por cada respuesta NO, no hay puntos.
1. ¿Hace menos de 2 comidas al día?
2. ¿Come menos de 5 raciones de fruta y verdura por día?
3. ¿Toma más de 3 copas de bebida alcohólica por día?
4. ¿Tiene problemas para masticar por sus dientes y encías?
5. ¿Come solo la mayoría de las veces?
6. ¿Tiene problemas para ir a comprar sus alimentos?
7. ¿Tiene problemas para preparar sus alimentos?
8. ¿Padece alguna enfermedad que no le permita comer como comía?
9. ¿Toma más de tres pastillas de medicamentos al día (no vitaminas)?
10. ¿Ha bajado más de 4 kilos en los últimos tres meses?
EVALUACIÓN
Más de 5 puntos
ALTO RIESGO
Buscar ayuda y solicitar orientación profesional.
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De 3 a 5 puntos
BAJO RIESGO
Revisar las respuestas afirmativas y si le es posible modificarlas.
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Menos de 3 puntos
SIN RIESGO
Repita en 6 meses
Ahora; esto es para las personas de la tercera edad; sin embargo si usted no ha llegado a esta y su cuestionario da positivo más de tres; pues nuestra edad cronológica deberíamos ponerla en consideración……………………cuántos años tiene realmente?
1 comentario:
Me parece que incidir en la alimentación en la tercera edad es importantísimo. Por eso me permito felicitarles por este post. Creo que muchas personas mayores, que viven en sus casas o en residencias pra ancianos podrían beneficiarse del hecho de que quien les prepare la comida lo lea.
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