¿LOS ANTOJOS ENGORDAN EN EL EMBARAZO?
Esta pregunta generalmente no solo lo hacen las mujeres embarazadas sino que muchas veces llega a ser el pretexto más importante a la hora de evaluar a una gestante y darnos cuenta de que se excedió en la ganancia de peso durante la gestación.
Los conocidos antojos en realidad empiezan con los cambios hormonales en una gestante; durante los primeros meses el Desequilibrio del Estrógeno con el aumento de la HCG (Gonadotrofina Coriónica) no solo se manifiestan en las nauseas y la poca tolerancia alimentaria sino también en los cambios de estados de ánimo de una embarazada. El 30% de las mujeres en periodo gestacional experimentaran por lo menos un antojo en la dulce espera, mientras que el 20% mantendrán los antojos a lo largo del embarazo en forma constante, variando inclusive de mes a mes.
La Hiperémesis gravídica en las 12 primeras semanas producto de los cambios hormonales en la futura Madre, determinaran ciertas predilecciones alimentarias; los vómitos y la nausea matutina obligaran a la madre a compensar con alimentos más frescos y de sabor dulce para contrarrestar esos malestares. También experimentará una necesidad de beber líquidos fríos y algunas mujeres que empiezan la gestación con hemoglobinas bajas experimentaran la necesidad de masticar hielo. Hasta aquí suena razonable no solo el cambio en el gusto y preferencias alimentarias consecuencia de desequilibrios también electrolíticos.
El factor psicológico juega un factor importantísimo ya que esto se acompaña del popular engreimiento gestacional; en donde la pareja y el entorno tratarán de meterle en la cabeza que esos son antojos y que debe comer tal o cual alimento, eso significa que el factor inductivo social es muchas veces mucho más fuerte que el instinto mismo. Si a esto le sumamos el estado de labilidad emocional de la gestante en donde muchas veces llora sin explicación o está muy sensible a los eventos externos pues encontrará en aquel antojo una buena válvula de escape y compensación secundaria.
Pasados las 12 primeras semanas y desaparecidas las molestias digestivas la futura madre experimentará un aumento de apetito y notará que ya no hay mas vómitos, esto sumado al incremento de Estrógeno Sanguíneo la volverá más perceptible a ciertos olores y sabores, en realidad sus sentidos se agudizan y esos ascos ya no son alimentarios sino aromáticos. Los requerimientos proteínicos y la baja de Vit B12 se hacen evidentes dentro del organismo y es el momento en que las predilecciones alimentarias cambian drásticamente hacia sabores un poco más intensos como algunos quesos, carnes e inclusive un poco de grasa en las comidas. Nuevamente juega un rol importante el entorno psicológico que viene acompañado de muchos regalos asociados a los dulces y sin querer la mujer atenúa un poco esa sensación de proteínas por comer chocolates y dulces con leche y he aquí el primer error de una gestante; no hacerle caso al cuerpo sino al entorno.
Durante las semanas siguientes y llegando a la 30 a 32, el aumento del tamaño del bebé en el útero se hace evidente, esto hace que la madre por las noches ya no tenga la necesidad de comer muchos alimentos por la distensión abdominal y opte por comer muy ligero, lamentablemente este es el momento en que el crecimiento orgánico del bebe se hace evidente y sus requerimientos nutricionales se multiplican, haciendo que la madre en horas de la noche experimente bajas en los niveles de glucosa sanguínea y por las madrugadas se despierte con apetito. Aquí nuevamente juega un rol importante el entorno ya que a horas de la madrugada lo que más se tiene a la mano es unas galletas, snakcs o dulces que elevaran los niveles de glucosa en sangre y la harán sentir mucho mejor, lo que influenciará en el bienestar y simulara que eso es lo que se necesita.
SUBIR DE PESO
Si lo vemos hasta aquí, pues los antojos tendrían un factor fisiológico por los cambios hormonales, pero también un factor psicológico muy fuerte que en la mayoría de casos está muy mal reforzado por el entorno familiar. Entonces una buena orientación alimentaria en la gestación no solo debería cubrir esos antojitos sino inclusive deberían ser un factor más para cubrir demandas nutricionales adecuadas y no ser en ningún caso motivo de engordar.
Una gestante en promedio debe ganar peso en no menos de 6 ni más de 16 kilos de su Índice de masa Corporal Adecuado al inicio del embarazo. Es por ello que hablamos los Médicos de una ganancia de peso adecuado redondeamos los 10 kilos aproximadamente. Cuando una gestante aumenta más peso o se escapa de su curva de ganancia habitual es simplemente descuido e irresponsabilidad ya que aumenta los factores de Riesgo perinatal; es decir, pone en juego la vida del bebé y de la propia Madre. Si una Mujer inicia el embarazo en sobrepeso es importantísimo alimentarse adecuadamente para estabilizar el peso, aquí los antojos serían un factor muy negativo ya que la gestante no solo tiene más peso sino que podría subir mucho más.
COMO SOBRELLEVAR LOS ANTOJOS
Como decimos los médicos “un chocolatito no es dañino, una caja de chocolates es un problema serio”. Asimismo su bebe no tendrá ningún daño ni nada raro al nacer si es que no le cumplieron su antojo; eso es un mito. Controlar los antojos es muy simple, asimismo debemos buscar herramientas para poder calmarlos con alimentos paliativos y a la vez que sean nutritivos y sobretodo que nuestro peso sea el adecuado. Es importante asimismo:
1. Tomar un buen desayuno, esto evitará tener bajas de glucemia en las mañanas. Asimismo nos asegurará una buena ingesta de nutrientes.
2. Ante cambios en el estado de ánimo, no refugiarse en la comida, a veces hasta un buen abrazo puede ser más intenso que un chocolate. Parte del antojo obedece a querer llamar la atención indirectamente, la pareja juega un rol importante aquí.
3. Recordar que el antojo es un evento fortuito y esporádico, no es una constante los nueve meses; si una mujer cree que todo el embarazo es una antojo está completamente equivocada y el apoyo psicológico es fundamental.
4. Si los antojos son por dulces, buscar un producto que lo contenga pero que a la vez sea nutritivo como un yogurt, un helado de vainilla, o fruta fresca que sea dulce. Si los antojos son salados, las nueces almendras, pecanas, etc. juegan un rol importante ya que consumimos buenas grasas vegetales y generan saciedad.
5. Mantenga sus visitas al ginecólogo estrictamente ya que al pesarla nos daremos cuenta si estamos yendo por buen camino y si hay que corregirlo es mejor inmediatamente.
6. Pero sobretodo recuerde que usted debe comer para el primer trimestre su bebe “se forme” (Aparatos y sistemas), durante el segundo trimestre debe comer para que su bebe madure todo lo que formo y durante el tercer trimestre debe comer para que su bebe crezca y nazca en un buen peso y sin complicaciones.
Al final usted no come por dos, ni por uno, usted come para que su bebe nazca sano y su parto sea un evento feliz. Es importante controlar la ingesta de dulces y elementos azucarados en el embarazo; muchas veces su ginecólogo le dirá que consuma un dulce si es que su bebe no se mueve; pero eso es una medida de “emergencia” ya que en la mayoría de casos se encuentra dormido e inactivo; esos golpes de azúcar no solo lo despiertan sino que lo sobreestimulan, y aumentan su frecuencia cardiaca alterándolo completamente. Está demostrado que el 30% de niños con problemas de hiperactividad han procedido de madres que consumieron mucho azúcar y chocolates en la gestación.
